LA CARRERA MINISTERIAL.
CONTENIDO DE LA ENSEÑANZA.
INTRODUCCIÓN. No todos los cristianos poseen un llamado ministerial, ya que cada uno a recibido del Espíritu Santo, del Señor Jesucristo y de Dios conforme ellos han hecho según su voluntad. Hay diferentes llamados y diferentes dones. Ejemplo: el que interpreta sueños, el que ve visiones, el que interpreta lenguas, pero también están los llamados a ministerios, como: el apóstol, el maestro, el pastor, el profeta y el evangelista. En esta enseñanza me centro en la carrera ministerial. Desde el momento que se sale al ministerio, se empieza una carrera que es nombrada varias veces en las Escrituras.
I. EL APÓSTOL PABLO ACABO SU CARRERA MINISTERIAL.
2 Timoteo.4:1-8 "Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina. Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas. Pero tú sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio. Porque yo ya estoy para ser sacrificado, y el tiempo de mi partida está cercano. He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida".
Hebreos 12:1 "Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante".
Dios nos manda en su palabra a cuidar nuestro testimonio ya que tenemos tan grande nube de testigos, hay que despojarse del pecado. Porque el enemigo espera que caigamos para luego señalarnos, y de esta manera el enemigo consigue destruir nuestro ministerio. Por otro lado se nos hace el llamado a correr con paciencia.
El término paciencia del griego bíblico es: hupomoné y significa: resistencia o aguante alegre (o esperanzado) constancia.
Este término griego nos da una idea bastante amplia de lo que es correr con paciencia.
La perseverancia en la carrera ministerial es galardonada en los cielos por Jesucristo, cuando estemos en el tribunal de Cristo.
El Señor nos dice en su palabra:
Hebreos.12:12 "Por lo cual, levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas".
Este pasaje de hebreos nos muestra la importancia de orar y humillarnos ante Dios de rodillas y con nuestras manos levantadas. La vida de todo ministro debe ser una vida de intimidad y oración con Dios y su Espíritu Santo.
HAY MUCHAS COSAS QUE ESTORBAN EN NUESTRA CARRERA MINISTERIAL:
Hebreos.12:15 "Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados".
Hay que cuidar nuestro oído, porque vendrán muchos a hablarnos mal de otro hermano en Cristo, o de cualquier otra persona. No permitamos que estas cosas estorben en nuestra carrera ministerial, porque por el pecado somos detenido, por el pecado caemos al suelo y somos detenidos en la carrera.
II. MUCHOS SERÁN ELIMINADOS DE LA CARRERA MINISTERIAL.
Muchos harán caer a otros que corren, o otro ministro que compite. Hay quienes pondrán trampas, servirán ellos mismos de tropiezo, tratarán de llevar ventaja sobre los que también corren en esta carrera cristiana. Pero el que vigilia la carrera, ve todo, y cuando él decida amonesta, y si no obedecen los elimina.
Es como el trabajo del árbitro primero saca la tarjeta amarilla, y cuando la falta es grabé saca la tarjeta roja, entonces el jugador queda eliminado. Que lastima que Dios descalifique a alguien y lo saque de esta carrera por cometer faltas graves.
Hoy en día hay muchos descalificados, y seguirán congregandose, evangelizando, ayunando en la iglesia, pero para Dios están ya eliminados de la carrera ministerial; incluso hay hombres y mujeres que fueron llamados a un ministerio pero ya están descalificados, están eliminados, es decir, ministerialmente ya no cuentan para Dios.
1 Corintios.9:24-27 " ¿No sabéis que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, pero uno solo se lleva el premio? Corred de tal manera que lo obtengáis. Todo aquel que lucha, de todo se abstiene; ellos, a la verdad, para recibir una corona corruptible, pero nosotros, una incorruptible. Así que, yo de esta manera corro, no como a la ventura; de esta manera peleo, no como quien golpea el aire, sino que golpeo mi cuerpo, y lo pongo en servidumbre, no sea que habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a ser eliminado".
Estás corriendo por cuál corona? ¿La corruptible o la incorruptible?
Hay que correr en santidad, de esta manera se resume una carrera ministerial en gloria, peleando la buena batalla de la fe, echando mano de la vida eterna, ayudando a los que corren, a todos los que compiten juntamente con nosotros, para que de esta forma recibamos el galardon. Sabemos contra que peleamos, contra los principales y potestades, contra gobernadores de la tinieblas, contra huestes espirituales de maldad en el segundo cielo, por lo tanto no golpeamos al aire, no corremos como ciegos espirituales, corremos sabiendo que es con nuestro propio cuerpo que batallamos día a día, pero a nuestro cuerpo debemos poner en servidumbre para que seamos de bendición a muchos, y para no venir a ser eliminados.
III. EL MINISTERIO DEL ESPÍRITU.
Somos llamados a ejercer el ministerio del espíritu, porque Yahweh nos ha hecho ministros competentes de un nuevo pacto, siendo que la competencia proviene de él.
2 Corintios.3:5-8 "no que seamos competentes por nosotros mismos para pensar algo como de nosotros mismos, sino que nuestra competencia proviene de Dios, el cual asimismo nos hizo ministros competentes de un nuevo pacto, no de la letra, sino del espíritu; porque la letra mata, mas el espíritu vivifica. Y si el ministerio de muerte grabado con letras en piedras fue con gloria, tanto que los hijos de Israel no pudieron fijar la vista en el rostro de Moisés a causa de la gloria de su rostro, la cual había de perecer,¿cómo no será más bien con gloria el ministerio del espíritu?".
Elohim promete en su palabra una gloria mayor que la que tenía Moisés cuando bajo del monte Sinaí, donde recibió los mandamientos. Pero esa gloria mayor en el nuevo pacto solo la consiguen aquellos ministros que entregan su vida al servicio, en servir a los demás, aquellos ministros que cada día golpean su cuerpo para que no salgan las obras de la carne; esa gloria la consiguen los ministros que se entregan al Espíritu Santo, que buscan a Dios de rodillas por las madrugadas, que ayunan, que vigilan, aquellos que evangelizan casa por casa.
Hay una carrera y hay premio para aquellos competidores. Adelante avancemos, prosigamos la meta.
Filipenses.3:13-14 "Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante,prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesus".
CONCLUSIÓN.
2 Timoteo.4:7-8 "He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe. Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida".
Bendecidos..!
