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jueves, 30 de julio de 2020

LOS DONES ESPIRITUALES



INTRODUCCIÓN. El Espíritu Santo hace como el quiere, otorgando a cada creyente dones maravillosos y poderosos. El Espíritu Santo le entrega dones de poder al cristiano para que tenga una vida  de fortaleza y poder en el Espíritu Santo, y para que conozca la voluntad de Dios en su vida, y para que el inconverso también conozca lo piensa Dios de él, los planes que ha preparado para su vida y muchas veces le hace el llamado, hablándole por medio de su Espíritu Santo utilizando como canal nuestras vidas. De esta y de otras formas se hacen evidentes los dones en nosotros.
 “La Deidad” que son “Padre”, “Hijo” y “Espíritu Santo”, tienen un profundo anhelo en su corazón, y es que el hombre se acerque a ellos.
Estos tres seres supremos o potestades superiores como le llamó el Apóstol Pedro por medio del Espíritu Santo, quien le inspiró a escribir sus cartas, quieren mostrarse al hombre tal como son,  y sabemos por la Escritura que los tres son uno; el término usado correctamente para designar que Dios, Jesús y el Espíritu Santo son uno, es: la  “Unicidad de Dios”; fuera de Dios no existe otro dios que se compare a él.
Si deseas tener los dones o un don, no es malo que lo desees, no importa quien seas, a Dios no lo limita tu condición de pecado, no se pone en tu contra si no has aceptado a Cristo todavía; pero si debes aceptar al Señor Jesús, luego, ser bautizado en su Espíritu Santo (este bautismo se evidencia hablando en lenguas).
 Luego que aceptes a Jesús en tu corazón el Espíritu Santo continuará haciendo su obra en ti y te será posible tener uno o más dones. Véase Hch.2:38.

CONTENIDO DEL SEMINARIO PARTE VIII.  (Pneumatología).

I.  ¿QUIÉN ES EL ESPÍRITU SANTO?.


Es una potestad superior que está en Dios y que trabaja con Dios y el Señor Jesús, llevando a cabo planes perfectos en la Creación y en el hombre. Estas tres personas Divinas tienen funciones muy importantes y enfocadas hacia el hombre, es decir,  llevan a cabo sus obras en el creyente y aún en los impíos. Analice el siguiente pasaje bíblico: 1Corintios.12:4-6 “ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo. Y  hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo. Y hay diversidad de operaciones, pero Dios, que hace todas las cosas en todos, es el mismo”.

Nota: podemos notar que son nombrados los tres, el Espíritu Santo, el Señor Jesucristo y Dios y vemos la función que hacen en conjunto.

II.    LOS DONES, ¿QUÉ SON?

La palabra transliterada del griego bíblico usada para don es “Carisma”: en este caso don otorgado por el Espíritu Santo, sin mérito, es decir, sin merecerlo, vemos un claro ejemplo de que recibimos un don sea por Dios o su Espíritu Santo sin merecerlo. Romanos.6:23.

Un don es un regalo, así que, los regalos que nos otorga el Espirítu Santo son para beneficio propio y para provecho de otros. 1Corintios.12:7/ Romanos.1:11 "porque deseo veros, para comunicaros algún don espiritual, a fin de que seáis confirmados".

Ahora, no son cualquier regalo; se trata de dones de poder.
No todo cristiano/a tiene un don o dones; y esto es porque quizás en su vida cristiana le ha dado poco interés al Espíritu Santo en su vida.
Es importante nuestra vida espiritual para el Espíritu Santo. Hay quienes viven una vida espiritual indiferente a  la presencia de Dios y de su Espíritu.

A todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu, pero hay quienes han rechazado al Espíritu Santo y no han querido tomar del Espíritu Santo, unos por temor y miedo al Espíritu Santo, otros por desinterés. 1Corintios.12:13.
La Escritura nos enseña que toda buena dádiva y todo don perfecto desciende del Padre de las luces “Dios”, el hace todas las cosas, porque Cristo está en él y el Espíritu Santo está en él, la palabra también nos enseña que los tres son uno. (1Juan.5:7).

Santiago.1:17 “Toda buena dádiva y todo don (carisma) perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces, en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación”.

Estos dones que regala el Espíritu Santo son perfectos y maravillosos.
Tomemos en cuenta lo siguiente: las personas nacen con habilidades, con talentos, pero en el caso de los dones del Espíritu Santo, no sucede así; las personas no nacen con los dones, el Espíritu Santo le entrega el don o dones al creyente en el tiempo que el desee. No toda persona puede tener los dones, porque no todos son hijos de Dios. Jesús es el Hijo de Dios y es el salvador de nuestras vidas, y el Espíritu Santo mora dentro del creyente no en el inconverso. (Por voluntad propia puedes recibir en tu vida a Jesús abriéndole la puerta de tú corazón a estos maravilloso seres Divinos.

Nota: Haciendo un breve repaso de las otras partes de este seminario de pneumatología le presento lo siguiente:Los pasos de la obra del Espíritu Santo en la vida de todos:

Convence de pecados, justicia y juicio (obra en el hombre impío, es decir, lleva a los hombre al arrepentimiento, y en este acto de arrepentimiento lo sella, le coloca el sello). Hechos. 2:38 “Entonces Pedro les dijo: " Arrepiéntanse y sean bautizados cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados, y recibirán el don del Espíritu Santo de Dios".  Es necesario el arrepentimiento, la conversión en Cristo Jesús, el bautismo en el cuerpo de Cristo para así poder recibir el regalo del Espíritu Santo.

En el creyente (lo inquieta y motiva a buscar a Dios y lo lleva a amar a Dios cada día, ayuda al creyente a seguir en la voluntad de Dios).

En el creyente (lo bautiza, el cristiano empieza a hablar en lenguas que edifican su vida, lo ayuda a madurar espiritualmente). La Escritura enseña que el que habla en lenguas así mismo se edifica.

En el creyente (le entrega dones poderosos para manifestar el poder de Dios, haciendo milagros y hablando por medio del Espíritu Santo que revela el pasado, el presente y el futuro, de acontecimientos, o lo vivido por una persona, cosas que van a suceder, o que le va a suceder a alguien, entre otras).

III.  LOS DONES Y EL CREYENTE.

Todo cristiano que tenga su nombre inscrito en el libro de la vida, tiene al Espíritu Santo morando en su ser; somos templo y morada del Espíritu Santo. Actualmente en todo el mundo hay personas que creen seguir siendo hijos de Dios pero ya han dejado de ser hijos de Dios, y es lamentable, porque el Señor Jesucristo ha eliminado sus nombres del libro de la vida, por vivir en desobediencia a Dios.  

Un creyente que tenga uno o más dones no le hace más espiritual que el creyente que aún no ha recibido los dones; por lo tanto si tienes uno o más dones, esto no te hace supermegaespiritual, tampoco eres más que otro que no tiene dones.
En la trayectoria de nuestra vida cristiana, quizás nos hemos dado cuenta, que existen personas que no tienen dones todavia, pero son más fieles a Dios que aquellos que tienen dones, son más espirituales y buscan más de Dios que los que ya poseen un don.
Si analizamos la historia de los creyentes de la ciudad de Corinto seguro que te acordarás de cosas que has visto en diferentes lugares. Estos creyentes de Corinto tenían dones, pero eran carnales, Pablo les escribió, y les dijo que eran carnales y niños espirituales, porque  andaban en celos, contiendas y disensiones, en otras palabras, no habían madurado espiritualmente:
1Corintios.3:1-4 “porque aún sois carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres?
Porque diciendo el uno: Yo ciertamente soy de Pablo; y el otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois carnales?”.

LA JACTANCIA Y LOS DONES.

1Corintios.4:7 “Porque ¿quién te distingue? ¿o qué tienes que no hayas recibido? Y si lo recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido?”.
Este pasaje es para entenderlo: aqui la palabra nos enseña que si hemos recibo un don por el Espíritu Santo, demostremos a los demás que realmente tenemos al Espíritu en nosotros, no dando lugar a la gloria personal, no dando lugar a la jactancia sino dando la gloria a Dios y a su Espíritu, sabiendo plenamente que es Dios operando a través de nuestras vidas y que no es por nosotros mismos las obras espirituales que hacemos y lo que decimos en muchas ocaciones.

IMPORTANCIA DE LOS DONES.

Es de suma importancia el conocimiento acerca de los dones espirituales: 1Co.12:1-3 “No quiero, hermanos, que ignoréis acerca de los dones espirituales.
Sabéis que cuando erais gentiles, se os extraviaba llevándoos, como se os llevaba, a los ídolos mudos.
Por tanto, os hago saber que nadie que hable por el Espíritu de Dios llama anatema a Jesús; y nadie puede llamar a Jesús Señor, sino por el Espíritu Santo”.

⏹️TENIENDO LOS DONES SE EVITA CAER EN ERRORES DOCTRINALES:

Los dones nos capacitan, por ejemplo el don de discernimiento de espíritus. Este don nos ayuda a identificar el espíritu que este operando en una persona cuando habla y enseña sobre cualquier cosa.

⏹️CON LOS DONES DIOS MISMO TESTIFICA DE QUE SOMOS DE ÉL: 



Hebreos.2:3-4 “¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, testificando Dios juntamente con ellos, con señales y prodigios y diversos milagros y repartimientos del Espíritu Santo según su voluntad”.


El Espíritu Santo otorga al creyente dones en su total soberanía, el hace como quiere.
Los dones se procuran: 1Corintios.14:1 “Seguid el amor; y procurad los dones espirituales, pero sobre todo que profeticéis”.
Es importante la profecía dentro del cuerpo de Cristo, ella nos edifica.

¿POR QUÉ EL ESPÍRITU SANTO ENTREGA LOS DONES?.

El Espíritu Santo reparte a su iglesia los dones, para equiparla, es decir, los dones son herramientas en el mundo espiritual, y deben ser correctamente usados para edificar a la iglesia. Por eso, el Espíritu Santo sabe a quien va a entregarle estas herramientas. Es necesaria, la sabiduría, el conocimiento y la prudencia al momento de usar un don. Los creyentes no deben caer en celos con otro que si tiene dones, toda clase de celo es pecado, y en este caso se llama celo ministerial; recordemos que somos un cuerpo en Cristo Jesús y cada miembro del cuerpo lleva a cabo funciones diferentes a los otros, ejemplo: las manos nos sirven para escribir, tocar un instrumento, comer, y los ojos para ver; así cada uno de nosotros como creyentes tenemos diferentes funciones por la diversidad de dones, así lo enseña la palabra de Dios. 1 Corintios.12:4-6.

El Espíritu Santo tiene tanto para darnos que no son solamente nueve dones hay muchos más; un ejemplo en la Escritura lo vemos a través de José el interprete de sueños, el mismo que fue vendido por sus hermanos como esclavo. (la interpretación de sueños es un don entregado por Dios que opera en nuestras vidas para mostrarnos y revelarnos lo que el quiera). Otro ejemplo de dones dados por Dios lo vemos en la vida del apóstol Pablo, el tenía el don de continencia, es decir, pudo vivir sirviendo a Dios sin tener una mujer como esposa. 1Corintios.7:9 “pero si no tiene don de continencia, cásense, pues mejor es casarse que estarse quemando”.  Véase: 1Corintios.7:8.

Nota: este don de continencia Dios se lo entrega a pocas personas, porque son personas que el necesita en su obra de esta forma para gloria de él mismo. Dios llama a una persona de la forma que el quiere. 1 Corintios.7:17. 

* SOMOS EL CUERPO DE CRISTO Y ÉL ES LA CABEZA DE TODOS NOSOTROS.

Romanos.12:3-6 “Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno.Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función, así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros.De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada, si el de profecía, úsese conforme a la medida de la fe...”

Pensar con cordura, la palabra cordura deriva de dos términos griegos que significa ahorro y mente. Podríamos decir, que no debemos pensar más allá de lo que Dios nos ha dado, no exagerando hablando que tenemos algo que en realidad no hemos recibido.

1Corintios.12:11 “Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu, repartiendo a cada uno en particular como él quiere”.

Nota: somos renovados cada día por medio del Espíritu Santo. Tito:3:5. Esta renovación trae cambios constantes en nuestra vida. 

Si tienes un don y no sabes como usarlo de una forma apropiada pide al Espíritu Santo que te enseñe Juan.14:26.

 ES IMPORTANTE RESALTAR LO QUE NOS MUESTRA LA ESCRITURA.

1Corintios.12:4-6 “ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo. Y  hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo. Y hay diversidad de operaciones, pero Dios, que hace todas las cosas en todos, es el mismo”.

La Escritura nos enseña que los dones los entrega el Espíritu Santo. En los primeros puntos de este segmento pudo ver lo que era un don, ahora verás que son ministerios y operaciones:

¿QUÉ SON MINISTERIOS?

Los ministerios son dones o regalos entregados por el Señor Jesucristo al creyente que el ha elegido para determinada labor, estas labores son: apóstol, profeta, maestro, evangelista, pastor. Estas son cinco labores fundamentales, son roles para edificar al cuerpo de Cristo y pueden ser ejercidas tanto por hombres como por mujeres.
Ministerios: el término usado en griego es “Diakonia” y significa formas de servir a Dios: 1Corintios.12:5.
Los ministerios que el Señor Jesús otorga son para servir en la obra de Cristo.

¿QUÉ SON OPERACIONES?

OPERACIONES: del griego “Energema”, de la misma raíz etimológica de energía; esta energía proviene de Dios, es decir, Dios opera o energetiza a los creyentes de diferentes maneras. La palabra energía está relacionada con movimiento, con operación, con función. Energía es lo opuesto a la inercia, que es estar quieto.
Inercia: no moverse, permanecer quieto, estancado, muerto. (un cristiano estancado es un cristiano inerte)

EN EL MUNDO ESPIRITUAL HAY DOS CLASES DE ENERGÍA:

La energía que proviene de Dios y la que proviene de satanás.

LA ENERGÍA QUE PROVIENE DE DIOS.  La energía que nos hace movernos, que nos impulsa hacia delante en esta vida cristiana. Esta energía de Dios nos hace funcionar hacia nuestra meta en Cristo Jesús. Dios energetiza al cristiano para que permanezca en obediencia a él.

Filipenses.3:13-14 “Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús".

LA ENERGÍA QUE PROVIENE DE SATANÁS: es aquella que energetiza en sentido contrario, es esa energía que impide avanzar, que hace que el hombre retroceda y no cumpla con el llamamiento de Dios. El propósito de la energía de satanás es dañar al cuerpo de Cristo, dividirlo para que no sea uno en Cristo Jesús.

*Las tinieblas es algo estático quieto, pero la luz fluye, la luz está en constante movimiento.
Entonces decimos que el mundo espiritual el diablo hace que las personas queden quietas, estancadas, entontecidas sin visión, sin conocimiento de lo que pasa a su alrededor, satanás los ciega espiritualmente para que no crean en la luz de Cristo.

HAY DOS CORRIENTES ESPIRITUALES: así como Dios opera, satanás también opera. (Tenemos la corriente celestial de Dios y la corriente de este mundo gobernada por satanás).
Una corriente conduce al hombre hacia arriba a la vida eterna al cielo, y la otra corriente negativa lleva al hombre hacia bajo al infierno.

Efesios.2:2 “en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia".

Cuando hay desobediencia, amargura, desánimo, apatía, frialdad espiritual, se encuentra  operando el reino de las tinieblas, es satanás y sus demonios influenciando tu vida con su corriente para apartarte de la voluntad Divina de Dios. 

¿A quién estás obedeciendo? ¿Qué corriente está operando en ti?

IV.  CLASIFICACIÓN DE LOS DONES DEL ESPÍRITU SANTO.

Los dones que el Espíritu Santo otorga a los creyentes, estos están clasificados de acuerdo a su función. Solo explicare los nueve dones, la otra lista de dones será ampliada en otra oportunidad. En la Escritura aparecen muchos dones más.

1Corintios. 12:4-10 “Porque a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia según el mismo Espíritu; a otro, fe por el mismo Espíritu; y a otro, dones de sanidades por el mismo Espíritu. A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas”.

🔲 SE CLASIFICAN EN TRES GRUPOS:

1) DONES DE INSPIRACIÓN. Don de profecía, don de géneros de lenguas, y don de interpretación de lenguas.

¿QUÉ ES INSPIRACIÓN?

Es la influencia por parte del Espíritu Santo en el creyente que lo toma para revelarle algo. No es una habilidad humana sino que es un soplo Divino del Espíritu de Dios. Esta acción de inspiración capacita al hombre para comunicar palabras Divinas.

DON DE PROFECÍA. Dios en su palabra nos hace énfasis en este don. El don de profecía es la proclamación de la palabra del Señor, es la predicación de la palabra, para exhortar, dar aliento, animar. El Espíritu Santo da la inspiración para hablar de la palabra a una persona o también a un grupo.

1Co.14:1 “ Seguid el amor; y procurad los dones espirituales, pero sobre todo que profeticéis”.

1Co.14:3 “Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación”.

Vemos el énfasis del apóstol Pablo en profetizar, es decir en proclamar la palabra: 1Co.14:5 “5  Así que, quisiera que todos vosotros hablaseis en lenguas, pero más que profetizaseis; porque mayor es el que profetiza que el que habla en lenguas, a no ser que las interprete para que la iglesia reciba edificación”.

¿Quieres ser mayor en el reino de Dios? Si tu respuesta es si, entonces comienza a profetizar, deate guiar por el Espíritu Santo busca su llenura para que enseñes no con tus propias palabras, sino con palabras del Espíritu de Dios. Recuerda que somos canales de Dios, somos sus instrumentos, y el nos usa para traer edificación al cuerpo de Cristo.

DON DE GÉNEROS DE LENGUAS. Estas lenguas no son terrenales, provienen del Espíritu Santo de Dios, por lo tanto nos edifican cuando las hablamos, y hablamos es a Dios directamente, y nadie las entiende porque es por el Espíritu Santo que hablamos misterios con Dios. 1Co.14:2 “Porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque por el Espíritu habla misterios”.

Que hermoso es hablar o orar con Dios nuestro Padre en estas lenguas, este lenguaje edifica nuestro espíritu y mejora y da sensación de una paz interior, alegría y seguridad de salvación. Somos nutridos a través de estas palabras que hablamos sin conocer sus significados. 1Co.14:4 “El que habla en lengua extraña, a sí mismo se edifica; pero el que profetiza, edifica a la iglesia”.

Mr.16:17 “Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas”.

EN LA ESCRITURA  PODEMOS APRECIAR LA IMPORTANCIA DE SABER USAR ESTE DON DE LENGUAS, OBSERVEMOS:

1Co.14:6 “Ahora pues, hermanos, si yo voy a vosotros hablando en lenguas, ¿qué os aprovechará, si no os hablare con revelación, o con ciencia, o con profecía, o con doctrina?”.

1Co.14:9-14 “Así también vosotros, si por la lengua no diereis palabra bien comprensible, ¿cómo se entenderá lo que decís? Porque hablaréis al aire.

Tantas clases de idiomas hay, seguramente, en el mundo, y ninguno de ellos carece de significado.

Pero si yo ignoro el valor de las palabras, seré como extranjero para el que habla, y el que habla será como extranjero para mí.  Así también vosotros; pues que anheláis dones espirituales, procurad abundar en ellos para edificación de la iglesia.
Por lo cual, el que habla en lengua extraña, pida en oración poder interpretarla.
Porque si yo oro en lengua desconocida, mi espíritu ora, pero mi entendimiento queda sin fruto”.

Si hablas en lengua no es necesario hablarlas que todos oigan, mucho menos cuando hay inconversos en la congregación o en el lugar donde están reunidos; pero si se sabe que hay interprete de lenguas pueden hablarse con libertad pero en orden uno habla y el otro interpreta. El apóstol Pablo dedicó tiempo para enseñar sobre el don de lenguas a los corintios:

1Co14:16-19 “Porque si bendices sólo con el espíritu, el que ocupa lugar de simple oyente, ¿cómo dirá el Amén a tu acción de gracias? pues no sabe lo que has dicho.
Porque tú, a la verdad, bien das gracias; pero el otro no es edificado.
Doy gracias a Dios que hablo en lenguas más que todos vosotros; pero en la iglesia prefiero hablar cinco palabras con mi entendimiento, para enseñar también a otros, que diez mil palabras en lengua desconocida”.

1Co.14:23-28 “Si, pues, toda la iglesia se reúne en un solo lugar, y todos hablan en lenguas, y entran indoctos o incrédulos, ¿no dirán que estáis locos?
Pero si todos profetizan, y entra algún incrédulo o indocto, por todos es convencido, por todos es juzgado; lo oculto de su corazón se hace manifiesto; y así, postrándose sobre el rostro, adorará a Dios, declarando que verdaderamente Dios está entre vosotros.
¿Qué hay, pues, hermanos? Cuando os reunís, cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tiene revelación, tiene interpretación. Hágase todo para edificación.
Si habla alguno en lengua extraña, sea esto por dos, o a lo más tres, y por turno; y uno interprete. Y si no hay intérprete, calle en la iglesia, y hable para sí mismo y para Dios”.

LA DECENCIA Y EL ORDEN SON IMPORTANTES CUANDO SE USA UN DON:

1Co.14:39-40 “Así que, hermanos, procurad profetizar, y no impidáis el hablar lenguas; pero hágase todo decentemente y con orden”.

 DON DE INTERPRETACIÓN DE LENGUAS. La interpretación es necesaria porque por medio de la interpretación de lenguas podemos entender el mensaje que en un momento dado trae el Espíritu Santo. El creyente que interpreta no es porque entienda el lenguaje que habla el que habla en lenguas, sino que es el Espíritu Santo quien decodifica el mensaje, en otras palabras, el intérprete dice lo que recibe del Espíritu Santo, y él, así como el resto de oyentes son edificados con las palabras del Espíritu Santo de Dios.

1Co.14:27-28 “Si habla alguno en lengua extraña, sea esto por dos, o a lo más tres, y por turno; y uno interprete. Y si no hay intérprete, calle en la iglesia, y hable para sí mismo y para Dios”.

2) DONES DE REVELACIÓN.

Son tres: don de palabra de sabiduría, don de palabra de ciencia y don de discernimiento de espíritus.

DON DE PALABRA DE SABIDURÍA. Este don está relacionado con la revelación por parte del Espíritu Santo para expresar palabras con sabiduría espiritual.
Este don es maravilloso así como el resto de dones. Esta sabiduría no es terrenal, no se trata de la sabiduría que puede tener una persona, y que adquiere con el tiempo, esta sabiduría la imparte en un momento dado el Espíritu Santo al creyente que posee este don, para que diga lo que el Espíritu Santo quiere que diga a una personas o grupo de personas, y para que haga algo en esta sabiduría que imparte el Espíritu Santo.
Este don no solo se manifiesta en el cristiano cuando está en la congregación o entre un grupo de personas, sino también en privado; se puede escuchar en secreto la voz de Dios. El Espíritu Santo te puede traer estas palabras de sabiduría para tu propia edificación.. Así también este don se hace manifiesto en el creyente para Dios traer palabra de sabiduría con exhortación, consolación, con una palabra de aliento para una determinada persona sea creyente o no creyente. En muchos casos este don se manifiesta cuando la persona está en plena predicación enseñando la palabra.
1 Corintios 2:13 "lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual".

El don de palabra de sabiduría es sobre todo para estimular a alguien, aconsejarlo, darle palabras que alienten su espíritu y para que tomen una buena decisión. En varios casos el Espíritu Santo le ha dicho a un creyente no hagas tal cosa, no vayas a tal lugar; es allí donde el consejo de Dios viene a conocimiento del hombre, siendo un consejo sabio.
El don de palabra de sabiduría no debe confundirse con el espíritu de sabiduría que Dios da a sus santos para que comprendan sus mandamientos y para comprender el conocimiento de Dios. Ef.1:17 “para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él”.

DON DE PALABRA DE CIENCIA.  Este don actúa en el creyente para traer palabra de ciencia, no se trata de la ciencia humana, es una ciencia Divina, Dios nos regala esta pequeña parte de su conocimiento, del conocimiento que el tiene acerca de todo lo que pasa, lo que viven las personas, lo que se está gestando en el mundo espiritual, un acontecimiento en el pasado, presente o futuro. Este don actúa en algunos casos para dar avisos importantes a una persona. Esta palabra de ciencia que viene a los que tenemos este don nos permite conocer lo que otros no conocen, es algo que ha estado en secreto, pero el Espíritu te lo muestra en un tiempo determinado, para orar por la persona, para exhortar a la persona; muchas veces te muestra su condición espiritual, que ha dicho la persona de alguien, como ha actuado consigo misma. Si tienes este don el Espíritu Santo te trae entendimiento y comprensión de ciertas cosas que estén sucediendo en una familia, congregación o ministerio o que le estén sucediendo a una persona. Este don es un conocimiento Divino que Dios te hace saber para ayudar a las personas no para criticar su vida privada, ni divulgar lo que el Espíritu Santo te ha revelado sobre alguien, si el Espíritu Santo te revela algo, es para que ores y reprendas todo espíritu inmundo que este afectando a alguien.

1Co.12:8 “Porque a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia según el mismo Espíritu”.

Ejemplo de este don en la Escritura: Hch.5:1-6 “Pero cierto hombre llamado Ananías, con Safira su mujer, vendió una heredad, y sustrajo del precio, sabiéndolo también su mujer; y trayendo sólo una parte, la puso a los pies de los apóstoles. Y dijo Pedro: Ananías, ¿por qué llenó Satanás tu corazón para que mintieses al Espíritu Santo, y sustrajeses del precio de la heredad? Reteniéndola, ¿no se te quedaba a ti? y vendida, ¿no estaba en tu poder? ¿Por qué pusiste esto en tu corazón? No has mentido a los hombres, sino a Dios. Al oír Ananías estas palabras, cayó y expiró. Y vino un gran temor sobre todos los que lo oyeron.
Y levantándose los jóvenes, lo envolvieron, y sacándolo, lo sepultaron”.

Jn.1:47-50 “ Cuando Jesús vio a Natanael que se le acercaba, dijo de él: He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño. Le dijo Natanael: ¿De dónde me conoces? Respondió Jesús y le dijo: Antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi. Respondió Natanael y le dijo: Rabí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel.
Respondió Jesús y le dijo: ¿Porque te dije: Te vi debajo de la higuera, crees? Cosas mayores que estas verás”.
Hch.9:11-12 “ Y el Señor le dijo: Levántate, y ve a la calle que se llama Derecha, y busca en casa de Judas a uno llamado Saulo, de Tarso; porque he aquí, él ora, y ha visto en visión a un varón llamado Ananías, que entra y le pone las manos encima para que recobre la vista”.

Mt.26:34 “Jesús le dijo: De cierto te digo que esta noche, antes que el gallo cante, me negarás tres veces”.

Mt.16:15-17 “El les dijo: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?. Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos”.

En estos pasajes bíblicos se pueden apreciar las formas en las que se manifiesta este don de palabras de ciencia. El Espíritu Santo te muestra con claridad algo que ha sucedido sin tu haberlo presenciado con tus ojos físicos, las imágenes llegan a tu mente y el Espíritu Santo te revela con palabras lo sucedido, es decir, te dice lo que una persona ha hecho o dicho.

DON DE DISCERNIMIENTO DE ESPÍRITUS. Este don es muy importante y es el Espíritu Santo quien lo entrega, el reparte los dones en la medida que el desee. 1Co.12:10 “A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas; y a otro, interpretación de lenguas”.

Muchas veces has llegado a un lugar, a una reunión o congregación, ministerio, y ha podido darte cuenta por el Espíritu Santo, qué espíritus han estado operando en las personas. Los espíritus contrarios sabemos que son los del reino de las tinieblas, estos espíritus se oponen y usan aún a algunos creyentes débiles para dañar y servir de obstáculos a otros. Si el Espíritu Santo te muestra este mover de espíritus en las personas es para que reprendas y ordenes a esos espíritus que salgan de las vidas. Es importante también dar a conocer a otros creyentes que tengan madurez espiritual de los espíritus que se han estado moviendo para que juntos les reprendan, y para que sean cuidadosos a la hora de tratar o hablar con la persona afectada por un espíritu.

*Ejemplo los Espíritus de error, de confusión, de engaño, estos atacan a los creyentes e inconversos para que caigan en errores doctrinales, confundiéndoles de tal manera que se les hace difícil entender algo de la Escritura, y empiezan a distorsionar la verdad bíblica. Estos espíritus de error y engaño llevan fácilmente a las personas a herejías o desviación de la verdad de la palabra.

1Ti.4:1 “Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios...”

Siempre hay que tomar en cuenta la discreción y la prudencia cuando este don actúa en nosotros.
Todos tenemos que apreciar a nuestro hermano en Cristo y confiar en Dios que él es el que nos equipa para trabajar en su obra, para beneficiar al cuerpo de Cristo e impedir que doctrinas de demonios entren en las congregaciones, para eso es este don.  

Mt.16:22-23 “Entonces Pedro, tomándolo aparte, comenzó a reconvenirle, diciendo: Señor, ten compasión de ti; en ninguna manera esto te acontezca. Pero él, volviéndose, dijo a Pedro: !!Quítate de delante de mí, Satanás!; me eres tropiezo, porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres”.

Evidentemente en Pedro un fiel seguidor de Jesús se estaba moviendo un espíritu de engaño para impedirle a Jesús entregarse voluntariamente para ir a morir por nosotros. Debemos ser espirituales y discernir lo bueno y lo malo para no caer en el engaño del diablo. Muchas veces un supuesto buen consejo nos puede llevar a tomar una mala decisión y nos puede apartar de la voluntad de Dios para nuestras vidas.

3) DONES DE PODER.

Este grupo de dones  manifiesta el poder de Dios para traer sanidad y diferentes milagros en las personas. Recordemos que somos canales de Dios para las bendiciones que el tiene para nosotros, somos sus vasos, sus instrumentos para demostrar su gloria en la tierra.

DON DE FE. Este don capacita al creyente para operar en un momento dado, comprendiendo el mecanismo de realidades del mundo del espíritu, donde no gobiernan las leyes del tiempo y del espacio. Esta aseveración es imposible de aceptar para una mente que sólo utilice la razón. Este alto grado de fe como don del Espíritu Santo le permite al creyente operar en autoridad, con seguridad y firmeza ante una enfermedad, sea propia o que la tenga otra persona. También opera cuando va a tomar una determinación en el mundo espiritual y físico. Esta fe trae al plano físico muchas cosas que le hemos pedido a Dios en oración, y también se evidencia cuando se proclama una palabra y se cumple. Este poder es posible en el creyente por medio del Espíritu de Elohim. La persona con este don cree firmemente en  Dios y en su poder y en el poder de la palabra, para hacer y hablar con autoridad.

Mt.17:20 “Jesús les dijo: Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible”.

Hch.6:8 “Y Esteban, lleno de gracia y de poder, hacía grandes prodigios y señales entre el pueblo”.

DON DE SANIDAD. Dios le da poder a la persona que recibe este don para operar llevando a cabo diferentes sanidades en los cuerpos. Todo creyente debe sentirse confiado que Dios obra a través de nuestras vidas de nuestras manos para que haya sanidad en una persona sin importar que no tengas este don de sanidad. El creyente con este don de poder habla con autoridad entendiendo el poder que ha recibido del Espíritu Santo para sanar a los enfermos, y muchas veces para sanar a personas con alguna enfermedad espiritual, los oprimidos por el diablo.

Estos dones maravillosos se evidenciaron en la vida y ministerio de Cristo.

Lc.4:18 “El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos”.

Hch.3:1-8 “Pedro y Juan subían juntos al templo a la hora novena, la de la oración.
 Y era traído un hombre cojo de nacimiento, a quien ponían cada día a la puerta del templo que se llama la Hermosa, para que pidiese limosna de los que entraban en el templo.
Este, cuando vio a Pedro y a Juan que iban a entrar en el templo, les rogaba que le diesen limosna.
Pedro, con Juan, fijando en él los ojos, le dijo: Míranos. Entonces él les estuvo atento, esperando recibir de ellos algo.
Mas Pedro dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda. Y tomándole por la mano derecha le levantó; y al momento se le afirmaron los pies y tobillos; y saltando, se puso en pie y anduvo; y entró con ellos en el templo, andando, y saltando, y alabando a Dios”.

DON DE MILAGROS. Este don no esta sujeto a la voluntad de los hombres sino a la de Dios mismo, si operas en un milagro es porque Dios te lo ha permitido y el mismo es el que opera para que sucedan las cosas de una forma sorprendente, puede ser en tu vida o en la de otras personas. Un milagro no proviene de una causa natural o por la voluntad de alguien, es por Dios mismo que pasan.

Hch.12:7-10 “Y he aquí que se presentó un ángel del Señor, y una luz resplandeció en la cárcel; y tocando a Pedro en el costado, le despertó, diciendo: Levántate pronto. Y las cadenas se le cayeron de las manos. Le dijo el ángel: Cíñete, y átate las sandalias. Y lo hizo así. Y le dijo: Envuélvete en tu manto, y sígueme.
Y saliendo, le seguía; pero no sabía que era verdad lo que hacía el ángel, sino que pensaba que veía una visión. Habiendo pasado la primera y la segunda guardia, llegaron a la puerta de hierro que daba a la ciudad, la cual se les abrió por sí misma; y salidos, pasaron una calle, y luego el ángel se apartó de él”.

Con este don suceden acontecimientos en tu vida y alrededor de ti, que testifican del poder de Dios en la tierra.

Hch.8:39-40 “Cuando subieron del agua, el Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco no le vio más, y siguió gozoso su camino. Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea”.

El Espíritu Santo te puede trasladar corporalmente a un lugar, así como puedes ser llevado en visión a un lugar para mostrarte algo que el Señor desea que veas.
Este don también se evidencia cuando oras en la voluntad de Dios para que suceda un milagro, ejemplo: la multiplicación de alimentos que el Señor Jesús llevó a cabo en varias ocasiones y los milagros del apóstol Pablo:

Hch.13:1-12 “Ellos, entonces, enviados por el Espíritu Santo, descendieron a Seleucia, y de allí navegaron a Chipre. Y llegados a Salamina, anunciaban la palabra de Dios en las sinagogas de los judíos. Tenían también a Juan de ayudante. Y habiendo atravesado toda la isla hasta Pafos, hallaron a cierto mago, falso profeta, judío, llamado Barjesús, que estaba con el procónsul Sergio Paulo, varón prudente. Este, llamando a Bernabé y a Saulo, deseaba oír la palabra de Dios. Pero les resistía Elimas, el mago (pues así se traduce su nombre), procurando apartar de la fe al procónsul. Entonces Saulo, que también es Pablo, lleno del Espíritu Santo, fijando en él los ojos, dijo: !!Oh, lleno de todo engaño y de toda maldad, hijo del diablo, enemigo de toda justicia! ¿No cesarás de trastornar los caminos rectos del Señor? Ahora, pues, he aquí la mano del Señor está contra ti, y serás ciego, y no verás el sol por algún tiempo. E inmediatamente cayeron sobre él oscuridad y tinieblas; y andando alrededor, buscaba quien le condujese de la mano.
Entonces el procónsul, viendo lo que había sucedido, creyó, maravillado de la doctrina del Señor”.

No dudes en ningún  momento de los milagros poderosos que puede hacer el Señor y su Espíritu Santo siempre te acompañaran para protegerte y guiarte en estos milagros. Cree y confía en Dios que todo lo puede.

CONSEJO BÍBLICO SOBRE LOS DONES ESPIRITUALES Y EL ESPÍRITU SANTO.

1Ts.5:19-21 “No apaguéis al Espíritu. No menospreciéis las profecías. Examinadlo todo; retened lo bueno”.

2Ti.1:6 “Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos”.

CONCLUSIÓN. Doy gracias a Dios el Padre por habernos tenido en su predestinación, nos ha adoptado como hijos suyos para alabanza y gloria de su nombre, para exaltarle y conocer sus maravillas tan reales y poderosas. Seamos buenos administradores de la multiforme gracia que nos ha dado el Eterno. 1P.4:10 “Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios”.

Hay diversidad de dones como lo enseña la Escritura en Ro.12:6-8, pero estos nueve dones presentados en este segmento de este seminario son tan importantes que funcionen en cada uno de los que pertenecemos al cuerpo de Cristo. Recuerda que somos edificio de Dios en el espíritu, debemos crecer hacia arriba para alcanzar la vida eterna con Dios.    

Estos dones los puedes recibir luego que hayas aceptado a Jesucristo como Salvador para perdón de pecados, este bautismo se llama: “el bautismo en el cuerpo de Cristo”. Hechos 2:38 “Entonces Pedro les dijo: " Arrepiéntanse y sean bautizados cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados, y recibirán el don del Espíritu Santo de Dios".

No pierdas tu atención hacia el Espíritu Santo, si te dice ve a tal lugar hazlo, si te dice haz esto, hazlo, obedece su voz, deja que te dirija.

Con los dones Dios mismo confirma de que somos de él, y con los dones muchos son convencidos y creen en el evangelio de Cristo.

Bendecidos..!

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